TRASCENDENCIA HISTÓRICA DE «COMETARIOS REALES DE LOS INCAS» POR SU CONTENIDO ESPECÍFICO.
Por: Miguel Gonzales Corrales
Escritor arequipeño
Uno de los libros que me maravilló fue «Cometarios reales de los incas» (primera parte 1609 – segunda parte 1612) del Inca Garcilaso de la Vega. Son crónicas que describen detalladamente los pormenores del inicio y caída del Tahuantinsuyo hasta la llegada de los primeros españoles. Sabemos por historia todo lo referente a la conquista, sin embargo, cuando me adentré en su lectura, la cual me demoró más de lo esperado porque lo leía con pausa y reparando en los detalles más resaltantes me hizo entender cómo, exactamente vivieron los incas. Garcilaso indica, en muchas partes, el recuerdo de quienes le contaron la vida incaica como familiares directos de Huáscar, Huaina Capac, incluso su madre, sobrina del mismo Huáscar y Atahualpa, nieta de Huaina Capac, le confesó muchas de las historias que los incas creían, adoraban y pensaban, a través de la oralidad. Es un texto valioso porque cuenta como los incas crearon el imperio a través de Manco Capac y Mamá Occllo, pero el mismo autor arguye que es una historia fantástica creada para que las personas sometidas tuvieran miedo y adoraran al sol. Pues, señala que estos dos fundadores debieron venir de alguna zona del altiplano y como aquí, por la región cusqueña había gente animalizada porque vivan sin reglas, aprovecharon los dos esposos en hacerles creer en miedos y poderes sobrenaturales del sol. Así iniciaron la expansión del imperio. Desde el inicio reinstauraron reglas como obedecer el sistema de gobierno sin protestar y así lo respetaron hasta la rebelión de Atahualpa.
Se cuenta con detalle cada una de las regiones que van conquistando. Primero, les hacen saber por las buenas a quienes serán sometidos para anexarlos al imperio, si no lo aceptaban, peor aún, si se enfrentaban al Inca, había guerra. Por lo general muchas tribus por temor accedieron al sometimiento. Con esa estrategia incrementaron el imperio hasta Quito y el río Maule, por el sur, hasta los mapoche, pero ya no los conquistaron porque había mucho desierto. En más de 600 páginas de sus 9 libros, cada uno entre 26 a 40 crónicas, según la extensión del capitulo, nos muestra con detalles las guerra que tuvieron, las traiciones que afrontaron, su fauna, su flora, sus alimentos y como la población tuvo sus quehaceres desde los jóvenes desde los 16 años, como adiestraban a sus guerreros, que significaba los quipus, como educaron los amautas y la escuelas que tuvieron, según referencias (hoy ya no existen dichos recintos en Cuzco), como seleccionaron a las vírgenes y ocho años antes de la muerte de Huaina Capac llegaron los primero españoles a las costas peruanas. Atahualpa fue heredero del reino de Quito, pero quería el poder del imperio, por lo que se reveló contra el inca Huáscar a quien asalta en Cuzco, lo tortura y a todos los de la realeza lo va matando. A muchos iban a ejecutarlos en la plaza principal, pero algunos huyen, incluyendo la madre de Garcilaso, Chimpu Occllo, de doce años. Finaliza con la masacre de Atahualpa en todas las poblaciones alrededor del Cuzco y los nombres de los linajes por cada inca.
En suma, «Comentarios reales de los Incas» es un libro histórico completo o casi completo de la vida cotidiana de sus pobladores, fase por fase. Además, se complementa con referencias adicionales de cronistas como el padre Acosta y Cieza de León. Leí a algunos historiadores quienes indicaban que en su mayoría, era una ficción, pero pienso que no. Es una referencia heredada de los familiares del inca Garcilaso y él lo escribió como lo recordaba, incluso de muchacho antes de salir de Cuzco en 1560. Hay muchísimo más por decir, pero por ahora termino. Entonces, estas crónicas son el mejor aporte para la cultura y el aprendizaje de una de las civilizaciones más grandes del mundo: Los incas.