Dialogamos con Edward de Ybarra, destacada figura en el ámbito cultural y cinematográfico de Arequipa y América Latina, siendo versátil en áreas como gestión cultural, programación, curaduría, dirección de cine, grabación e investigación. Colabora en BULLA – Asociación Cultural y es director de Corriente de Encuentro Latinoamericano de Cine No Ficción.
Asimismo, lidera el Festival de Cine para Infancias y Juventudes Diversas, conocido como Serpentina y dirige el Archivo Fílmico de Cineasta Peruano José Antonio Portugal. Como director, desarrolla un papel clave en la Bienal de Grabado en Arequipa y contribuye al proyecto Red de Archivos Fílmicos Sur del Perú. Su participación diversa lo consolida como una figura influyente en la escena cultural y cinematográfica latinoamericana.
En el marco del Hay Festival Arequipa 2023, sostuvimos un diálogo con Edward de Ybarra a propósito de su labor como cineasta y promotor cultural, así como su participación en este festival de arte y humanidades.
¿Cuáles son los objetivos principales y en que edición van en su proyecto de Corriente de Encuentro Latinoamericano de Cine No Ficción que dirige? Coméntenos sobre ello.
La “Corriente” es un encuentro latinoamericano de cine no ficción que se encuentra en su décima edición. Este evento, programado del 27 de noviembre al 7 de diciembre, se dedica a explorar cinematografías alternativas. Utilizando la terminología de “no ficción” para destacar su enfoque en narrativas cinematográficas distintivas y fuera de lo convencional.
Para nosotros, el término ‘no ficción’ abarca diversas prácticas cinematográficas, incluyendo el cine documental, experimental, expandido y la ficción híbrida o alternativa. Estas comparten la característica de ser distintas, y en muchos casos, opuestas a los modos hegemónicos de hacer cine, como el cine de ficción comercial. Enfocándonos en narrativas únicas y desafiando las convenciones establecidas. Buscamos explorar y promover expresiones cinematográficas que se apartan de la corriente principal.
En estos años, hemos logrado que las actividades del encuentro atraigan a personas no solo de Arequipa interesadas en el cine, sino también de otras ciudades del Perú. Así como invitados de distintas partes de América Latina y el mundo. Este año, contaremos con la participación de invitados de Brasil, México, Bolivia, Chile y Perú. Aspiramos a que el público asistente no se limite únicamente a residentes de Arequipa, sino que incluya también a personas de otras ciudades.
Ahora coméntenos respecto a su proyecto en Serpentina: Festival de Cine para Infancias y Juventudes Diversas…
El Festival Serpentina es un evento enfocado en acercar el cine a niños, niñas y adolescentes que enfrentan situaciones de vulnerabilidad. Tales como la pobreza, orfandad o hospitalización. Así como aquellos que residen en áreas alejadas de las ciudades. El festival realiza diversas actividades en hogares, escuelas públicas, hospitales y comunidades rurales. Además de eventos abiertos al público en general en el centro de la ciudad. La programación incluye películas dirigidas a diferentes audiencias, desde niños hasta familias enteras. Además, se ofrecen actividades formativas, como talleres de cine, tanto para los jóvenes como para docentes, talleristas y adultos que trabajan con la juventud. El objetivo es proporcionar nuevas herramientas y enfoques para enseñar el cine de manera libre, lúdica y experimental. Promoviendo una apreciación más amplia y creativa del séptimo arte entre las infancias y juventudes diversas.
En relación al cine, ¿cuál es su perspectiva sobre la situación del cine peruano? Observamos que el gobierno respalda la industria cinematográfica peruana con 7.2 millones de dólares, en contraste con Brasil, que destina 224 millones de dólares. ¿Cree usted que esta diferencia se debe a un compromiso específico o cuál podría ser la razón detrás de ello?
Durante décadas, el sector cinematográfico en el Perú ha luchado por leyes y políticas culturales que impulsen su desarrollo, dada la naturaleza costosa de hacer cine. Las subvenciones estatales, especialmente a través de los estímulos económicos proporcionados por el Ministerio de Cultura, han sido cruciales para viabilizar proyectos cinematográficos y permitir el acceso a la educación y la investigación en el cine. Aunque el apoyo financiero del Estado ha aumentado gradualmente a lo largo de los años, se reconoce que podría hacerse más para equipararse con otros países de la región.
A pesar de los desafíos, se destaca la labor constante de un equipo técnico dentro del Ministerio de Cultura. Enfocado en promover políticas beneficiosas para el sector cinematográfico. Sin embargo, se señala la preocupación por los intentos en el actual congreso de implementar nuevos proyectos de ley que podrían afectar el panorama cinematográfico.
¿Qué piensa del proyecto de la ley de Adriana Tudela?
El proyecto de ley Tudela, propuesto por la congresista, ha generado una fuerte oposición en el sector cinematográfico peruano debido a su evidente falta de comprensión del funcionamiento del ecosistema cinematográfico y de los estímulos económicos. Se denuncia que el proyecto está basado en falsedades y desconocimiento, lo que se refleja en las declaraciones de los congresistas que lo respaldan. Aunque se espera que el proyecto no avance debido a su calidad deficiente, se reconoce que la ley vigente también presenta deficiencias, especialmente en cuanto a la centralización de los fondos concursables. A lo largo de más de 10 años, la mayoría de estos fondos se ha destinado a proyectos en Lima, lo cual se percibe como una política centralista.
Los cineastas y asociaciones de regiones han estado abogando por normativas más claras que aseguren una distribución más equitativa de los fondos a nivel nacional. A pesar de que la ley actual es perfectible, se destaca que ofrece la posibilidad de implementar mecanismos para una distribución más justa y equitativa de los fondos. Se espera que la organización del sector, en su rechazo al proyecto Tudela, también sirva para abordar las deficiencias existentes en la legislación vigente y buscar mejoras consensuadas.
¿Cuál es su opinión sobre la propuesta legislativa que menciona la posibilidad de importar cine extranjero para competir con la producción nacional? ¿Dónde se establece que ambas opciones, ya sea de cine nacional o extranjero, podrían recibir respaldo estatal basado en su rendimiento? Además, se contempla una reducción del 50% en este respaldo económico.
La propuesta de Tudela de subvencionar películas extranjeras para competir con la producción nacional y reducir el respaldo estatal en un 50% revela una visión limitada del cine. Ignora su función como expresión cultural y social. Los estímulos estatales deberían beneficiar a la sociedad civil, proporcionando acceso a obras en zonas rurales, apoyando a jóvenes en carreras de cine y financiando diversas áreas del ecosistema cinematográfico peruano. La propuesta simplifica el cine a un enfoque comercial, descuidando las diversas experiencias y expresiones vinculadas al audiovisual.
Ahora, ya que participará en el Hay Festival Arequipa y abordará un tema crucial como la cultura. ¿Podría explicar por qué eligió este tema y cómo lo considera un motor de transformación social?
Participaré en una mesa sobre gestión cultural en el Hay Festival, donde se abordarán retos y oportunidades en Perú y Arequipa. La cultura, vinculada a la calidad de vida, puede impulsar la transformación social, a pesar de sus aspectos negativos. En el Cono Norte de Arequipa, la cultura no se limita a ciertos estratos sociales, movimientos culturales en espacios diversos desafían la percepción centralizada en el centro de la ciudad. La cultura está ligada a derechos fundamentales como la libertad de expresión y la gestión cultural actúa como servicio comunitario, facilitando el acceso a estos derechos, aunque enfrentamos desafíos, creo en el impacto positivo de la gestión cultural en el Perú.