Urtasun y la Decisión Radical
El Ministerio de Cultura, dirigido por Ernest Urtasun, ha decidido suprimir el Premio Nacional de Tauromaquia, iniciando los trámites para su anulación definitiva. Este galardón, establecido en 2011 y entregado desde 2013, premiaba con 30.000 euros a figuras destacadas del toreo. La creciente preocupación por el bienestar animal y la baja valoración social de la tauromaquia han sido factores clave en esta decisión.
La supresión del Premio Nacional de Tauromaquia ha reavivado el debate sobre el lugar de los toros en la cultura española. Mientras algunos sectores defienden la tauromaquia como una tradición cultural valiosa, otros la consideran una forma de maltrato animal que no debe ser promovida ni premiada. Esta decisión del Ministerio de Cultura representa un punto de inflexión en la discusión sobre los valores culturales y el bienestar animal en España, marcando una nueva etapa en la relación del país con esta polémica tradición.
Indignación en el Sector Taurino
La cancelación del premio ha generado una fuerte respuesta en el sector taurino y entre partidos políticos como el PP y Vox. Vitorino Martín, presidente de la Fundación Toro de Lidia, criticó la medida y acusó a Urtasun de actuar por motivos ideológicos. También, diversos gobiernos regionales han manifestado su descontento y su intención de crear galardones alternativos.
Aplausos de los Defensores de los Animales
En contraste, las organizaciones defensoras de los derechos de los animales han celebrado la medida. La asociación Animanaturalis considera que la supresión del premio marca un hito en la lucha contra la tauromaquia, una práctica que califican de cruel.
La decisión del Ministerio de Cultura está respaldada por datos que reflejan un declive en el interés por la tauromaquia. Según una encuesta de la Fundación BBVA de 2022, la valoración del uso de animales en espectáculos taurinos es muy baja. Además, solo un 1,9% de los españoles asistió a algún festejo taurino entre 2021 y 2022. El número de eventos taurinos también ha disminuido significativamente, de 3.651 en 2007 a 1.546 en 2022.
Respuestas desde las Regiones
Ante la eliminación del premio nacional, varias comunidades autónomas han anunciado la creación de sus propios galardones taurinos. Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, ha propuesto unos premios autonómicos y ha invitado a otras regiones a coordinarse para mantener viva la tradición taurina. Valencia y Extremadura han expresado intenciones similares.
El Ministerio de Cultura justifica la eliminación del premio como una adaptación a la “nueva realidad social y cultural” de España. Según Urtasun, la mayoría de los españoles no apoya la tauromaquia, y el premio ya no refleja los valores actuales de la sociedad. Esta decisión se enmarca en un contexto de mayor conciencia sobre el bienestar animal.
Iniciativas en Defensa de la Tauromaquia
La empresa Pagés, gestora de la Plaza de Toros de la Maestranza en Sevilla, ha respondido a la decisión del gobierno con la campaña “Una entrada, un niño gratis”. Esta iniciativa permite que niños menores de ocho años asistan gratuitamente a las novilladas, buscando fomentar la afición taurina desde temprana edad y contrarrestar las medidas del Ministerio de Cultura.
De hecho, la eliminación del Premio nacional de Tauromaquia ha generado inmediatamente un alud de nuevos premios. El presidente de Aragón, el popular Jorge Azcón, ha anunciado inmediatamente que el Gobierno que preside impulsará la creación del Premio Nicanor Villalta a la mejor faena de la temporada taurina en Zaragoza, Huesca y Teruel en honor del torero turolense del mismo nombre, una decisión que ha sido acordada con la Asociación de Informadores Taurinos de Aragón, que será parte del jurado.