jueves, julio 17, 2025
HomePublicacionesArtículosProyecto de ley plantea eliminar la Educación Sexual Integral (ESI): ¿Qué está...

Proyecto de ley plantea eliminar la Educación Sexual Integral (ESI): ¿Qué está en juego? 

El pasado 10 de junio, la Comisión de Educación del Congreso de la República aprobó el Proyecto de Ley N° 9174, una iniciativa impulsada por la congresista y pastora evangélica Milagros Jáuregui de Aguayo (Renovación Popular), que plantea eliminar la Educación Sexual Integral (ESI) de las escuelas peruanas y sustituirla por una supuesta “educación sexual científica, biológica y ética”. 

La ESI es definida por organismos, como la Unesco, como un proceso educativo que abarca aspectos cognitivos, emocionales, sociales y físicos de la sexualidad. Busca dotar a los estudiantes de herramientas para tomar decisiones informadas, construir relaciones respetuosas y ejercer sus derechos con responsabilidad.

Eliminarla, según expertos, no implica una mejora. Al contrario, “la ESI ya es científica y ética. Lo que busca este proyecto no es mejorarla, sino anularla”, asegura Ayesha Dávila, directora de la sociedad civil CrESIendo. Añade que la propuesta nace de prejuicios, no del interés por el bienestar de niños, niñas y adolescentes.

La ESI también desempeña un papel clave en la prevención del embarazo no planificado, las enfermedades de transmisión sexual y la violencia de género. Sin este tipo de formación, la juventud queda expuesta a riesgos mayores. Rossina Guerrero, directora del Centro de Promoción y Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos Promsex, advierte: “Reducir la sexualidad solo a lo biológico es negar la experiencia humana y atentar contra derechos fundamentales”.

Esta propuesta afectaría la educación en valores como el consentimiento, la igualdad y el respeto por la diversidad. Víctor Vásquez, docente del Instituto CEPESEX, resalta que los actuales lineamientos “no son una ocurrencia ideológica ni un invento del Estado peruano. Se ajustan a estándares internacionales, recogen evidencia científica y se enfocan en la prevención y el desarrollo integral”.

En ese sentido, privar a los adolescentes de este tipo de educación puede vulnerar derechos como la libertad sexual, que según el marco legal peruano, puede ejercerse a partir de los catorce años. Para poder consentir libremente, se necesita información. Quitar la ESI sería, en los hechos, dejar a los adolescentes sin herramientas para ejercer esa libertad de forma responsable.

La ley pone en juego el derecho a la identidad, la ESI ayuda a los estudiantes a comprender y validar su identidad de género. Sin este apoyo, se pueden intensificar situaciones de rechazo, afectando la salud mental y emocional. El proyecto, sin embargo, insiste en calificar estas perspectivas como una “ideología”.

Más aún, este tipo de medidas puede alimentar discursos de discriminación. La violencia de género podría aumentar en un entorno donde no se enseñan conceptos como el consentimiento o la igualdad. De hecho, como advirtió Guerrero, el enfoque del proyecto “ignora todos estos avances y nos arrastra décadas atrás”.

La ESI está respaldada por organismos como la Unesco, UNFPA, Unicef, ONU-Mujeres, Onusida y la OMS, y se vincula a compromisos como los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Eliminarla no es un simple ajuste curricular: es un paso atrás en derechos, salud y equidad.

La eventual aprobación de la ley que descarta la ESI abre la puerta a reformas educativas impulsadas por ideologías religiosas o intereses particulares. Por eso, organizaciones y especialistas llaman a defender una educación sexual integral, basada en evidencia y enfocada en formar ciudadanos libres, responsables y respetuosos.

Redacción por Germain Soto

También te puede interesar: Retraso en estímulos para el libro y la lectura evidencia crisis de gestión en el Ministerio de Cultura

Publicaciones
Publicaciones relacionadas