La Fuerza Aérea del Perú (FAP) desmintió oficialmente los rumores difundidos el 23 de mayo sobre el presunto hallazgo con vida de la alférez Ashley Vargas Mendoza, quien desapareció el 20 de mayo tras la caída de una aeronave KT-1P durante una misión de instrucción en la costa de Pisco.
La noticia, que fue replicada por diversos medios y redes sociales, fue desmentida por la institución castrense, que confirmó que hasta la fecha no se ha establecido contacto con la piloto y que las labores de búsqueda continúan activas.
Avances de la operación de búsqueda
La FAP, en coordinación con la Marina de Guerra del Perú, la Policía Nacional y otras entidades del Estado, mantiene un operativo de búsqueda aérea, terrestre y marítima en la zona de la playa Supay, dentro de la Reserva Nacional de Paracas. Hasta el momento se han recuperado tres secciones estructurales de la aeronave, pero no hay rastro de Ashley Vargas.
Fiscalía inicia investigación preliminar
La Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Pisco ha iniciado una investigación preliminar por presunto homicidio culposo, y ha solicitado a la FAP los informes técnicos sobre la nave accidentada, los protocolos de seguridad, las condiciones del vuelo y la preparación de los pilotos.
El objetivo de la investigación es determinar si hubo responsabilidades en el incidente y esclarecer las circunstancias que rodearon la caída de la aeronave.

Familia fue víctima de estafa
En medio de la incertidumbre, la familia de Ashley Vargas también enfrentó una situación dolorosa: una estafa telefónica. Personas que se hicieron pasar por pescadores afirmaron haber rescatado a la piloto y solicitaron dinero para su traslado. Esta información también fue descartada por la FAP y la Policía Nacional, quienes señalaron que no existe ninguna evidencia de contacto con la alférez.
Artículo de Camila Luciana Carpio Pacheco